En Aguacates Flórez cultivamos y exportamos Aguacate Hass desde Colombia
Desde 2017, operamos bajo un principio simple: todo lo que exportamos lo producimos nosotros mismos.
Somos una empresa familiar con sede en Urrao, Antioquia, una zona agrícola por excelencia. Desde aquí, controlamos todo el proceso: sembramos, cosechamos, seleccionamos y exportamos directamente a nuestros clientes, sin intermediarios. Esto nos permite asegurar calidad, trazabilidad y cumplimiento en cada carga.
Exportamos en dos temporadas al año, con ventas de más de 200 contenedores anuales, todos con fruta proveniente exclusivamente de nuestras fincas. Este control directo es lo que marca la diferencia: trabajamos cada día para ofrecer un aguacate con sabor consistente, maduración óptima y condiciones ideales para distribución internacional.
Nuestra operación se basa en más de 400 hectáreas en producción activa y en un equipo técnico y humano que conoce cada detalle del cultivo. Exportamos a mercados que valoran tanto el producto como la forma en que se produce.
Creemos en relaciones comerciales claras, en decisiones que se sostienen en el tiempo y en procesos bien hechos desde la raíz.
Misión
Cultivamos y exportamos Aguacate Hass con altos estándares de calidad, trazabilidad y control en cada etapa.
Nuestro trabajo responde a las exigencias de los mercados internacionales y está guiado por principios de sostenibilidad, responsabilidad social y mejora continua.
Visión
Para el año 2028, seremos una empresa líder en la producción, comercialización y exportación de Aguacate Hass.
Nos proyectamos como una marca reconocida en Colombia y en el mundo por la calidad de sus productos, la innovación constante y el respeto por el medio ambiente, por quienes hacen parte del equipo y por quienes confían en lo que ofrecemos.
Urrao, un territorio agrícola por naturaleza.
Ubicado en el suroeste de Antioquia, este municipio ha desarrollado una relación profunda con la tierra. La agricultura no es solo una actividad económica: es parte del día a día, del conocimiento acumulado y de la identidad de quienes habitan la región. Aquí iniciamos nuestros cultivos, no solo por las condiciones técnicas que ofrece el territorio —como su altitud, clima templado y suelos fértiles—, sino porque creemos en trabajar desde lugares donde la experiencia agrícola se vive con sentido y compromiso.
Esta decisión nos ha permitido construir una operación conectada con el entorno, con control sobre cada etapa y
con la capacidad de responder a mercados que valoran la calidad y la trazabilidad desde el origen.
Altitud ideal
para el Aguacate Hass
Entre 1.800 y 2.400 msnm
Favorece el desarrollo del aguacate Hass: mejor textura, contenido de aceite óptimo y fruta uniforme.
Mano de obra local
con experiencia agrícola
La tradición del territorio se
refleja en el conocimiento
local. Nuestros equipos están
formados y comprometidos
con las buenas prácticas.
Clima templado y húmedo
todo el año
Temp. media entre 15 °C y 20°C
Más de 7.500 mm de lluvia anuales.
Esto permite una maduración
estable y dos temporadas de
cosecha bien planificadas.
Ubicación estratégica
para exportación directa
Desde aquí coordinamos
todo el proceso. Cada carga
se despacha desde el origen
bajo nuestras condiciones,
sin terceros, ni intermediarios.
Suelos fértiles
y bien drenados
Condiciones que reducen el riesgo
de enfermedades y permiten un
manejo agronómico más eficiente.
Un gran compromiso, una gran red
En Aguacates Flórez entendimos que una operación sólida comienza por las personas.
Nuestra mayor inversión ha sido generar estabilidad, empleo formal y oportunidades de crecimiento para quienes hacen posible que cada cultivo llegue a destino con la calidad que ofrecemos.
Creemos que el cuidado del producto empieza por el cuidado de quienes lo trabajan.
Desde esa convicción construimos relaciones duraderas, promovemos buenas prácticas agrícolas y sostenemos una cultura que combina experiencia, técnica y compromiso ambiental.
Los principios que guían nuestro día a día:
Cumplimiento: porque cada carga debe llegar en el momento acordado, con las condiciones pactadas y la calidad que se espera.
Productividad: porque mantener el ritmo con consistencia es parte del compromiso.
Eficacia: porque los resultados importan tanto como el esfuerzo.
Liderazgo: porque no delegamos el rumbo, lo trazamos y lo asumimos desde el origen.
Innovación: porque mejorar lo que hacemos es una tarea constante.